domingo, 4 de diciembre de 2011

Lenta

y cuidadosamente se sacó la ropa. Se olvidó de promesas hechas, de cuidar las formas, de saltar barreras, de cometer errores. Se olvidó por un momento -que sin dudas fue epifánico- de sus miserias, de sus rencores, de sus broncas contenidas.
Se entregó.

2 comentarios:

Carolina dijo...

todavia no

Carolina dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=6g2wqNeBUKs&feature=related