Esa noche no durmieron.
Sin embargo, soñaron con exactamente las mismas cosas: un barco con casco de madera húmeda y lustrosa, un mar de peces plateados. Y el gris de la tormenta que los aguardaba en el horizonte, automóviles azules uno al lado del otro, con olor a farmacia; soñaron también con brújulas, llaves y libros.
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2 comentarios:
GRISTORMENTA
De acuerdo, de acuerdo. Gristormenta.
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